lunes, 19 de octubre de 2009

Hoy en día, los CIOs deben buscar cuáles son los aspectos que precisan reforzar para cumplir los objetivos de su organización de TI y hacer frente a una situación de crisis económica que está dejando huella en todo el sector.

Ésta no es la primera vez que las empresas se encuentran sumergidas en este tipo de eventualidades. La última vez que la economía falló, algunos CIOs reaccionaron como si se les cayera el cielo encima y dominados por el pánico, tomaron decisiones equivocadas a la hora de recortar gastos. La experiencia ha enseñado que es necesario planear con antelación los recortes, sin descuidar la capacidad de la empresa para volver a crecer cuando se precise.

Eliminar competencia de TI
El boom de Internet provocó excedentes, que las tiendas de informática acumularan programas que no utilizaban y que hubiera cantidades ingentes de contratos sin leer. Por aquel entonces, los pioneros de los subcontratos de infraestructuras, diseñados para ‘ahorrar’, eran lanzados al mercado sin ni siquiera realizar un análisis aproximado del costo. Los viajes no eran una necesidad y las existencias de todo el mundo estaban al máximo.

Cuando explotó la burbuja, las empresas de TI se convirtieron en presas fáciles. Los gastos bajaron de forma considerable, pero con poca contingencia y no se realizó casi ninguna predicción estratégica sobre qué es lo que pasaría cuando el crecimiento se retomara. Los vendedores abandonaron el negocio, los capitalistas arriesgados dejaron de aportar ideas y los equipos de TI e I+D se disolvieron, obstaculizando cualquier tipo de innovación. Mientras tanto, los niveles de servicio caían y los conocimientos básicos empresariales se dejaban de lado a la vez que los subcontratos impulsivos aumentaban.

Finalmente, el sector de TI perdió su encanto para los jóvenes que comenzaban a cursar su carrera, produciéndose justo en el momento en el que la media de edad del personal de muchas organizaciones empezaba a madurar, situándose en torno a los cincuenta años.

Asegurar el futuro
El haber vivido una situación de crisis anterior ha hecho que los responsables sepan que hay ciertos recortes –como prescindir de inversiones en I+D– que debilitan la capacidad de los departamentos de TI para responder una vez que el negocio se ha puesto al día y es preciso contribuir a la innovación.
Suponiendo que la organización ya está llevando a cabo la estrategia correcta para solventar la situación tanto a nivel tecnológico (consolidar servidores, centros de datos…) como empresarial (licencias de venta y acuerdos de mantenimiento; aplazar adquisiciones y cómodos servicios de subcontrato bajo contratos que en verdad ayudan al ahorro), y que ha estructurado adecuadamente la organización ofreciendo incentivos de jubilación anticipada a empleados aptos, terminado cualquier papel de contratación de nuevo personal y aplazando los puestos vacantes de empleados.
¿Por qué con esto se obtendrá el éxito?
La pregunta es si estas tácticas realmente funcionan siendo TI un objetivo con unos gastos tan difíciles de reducir. La experiencia ha enseñado y, actualmente, los CIOs se comunican bastante mejor y saben cómo llevar un negocio y cómo explicar el impacto de las TI en los ingresos de la empresa, así como el valor de posiciones estratégicas de TI y la necesidad de nuevos contratos de alto potencial y bajo costo.

El responsable de TI está bien posicionado y posee las habilidades necesarias para escuchar a los trabajadores y negociantes asociados. Los CIOs que vivieron la crisis de TI de años anteriores son ahora más precavidos a la hora de planear el futuro que la organización realmente necesita.

Fuente: CIO Infoworld
Aportación por: Karina Elisea Gómez / Marketing Staff

No hay comentarios:

Publicar un comentario